Jesús Mustienes (Zaragoza 1941) se ha integrado como ponente en el selecto equipo de alpinistas que van a debatir sobre Alberto Rabadá y Ernesto Navarro durante los actos de homenaje con ocasión del 50 aniversario de su muerte en la cara norte del Eiger. Lo primero de todo ha sido darnos un billete para la placa de sus amigos Alberto y Ernesto ¡bien hecho Jesús! Experto montañero y escalador, con experiencia en los Pirineos y los Alpes, Jesús Mustienes es un aragonés polifacético. Artesano escayolista es además artista profesional, escultor y un gran amigo. Con 17 años en su casa le dirían: ¡hala, vete al Pirineo con Alberto, a que os dé el aire! Jesús apenas había escalado un poco en Mezalocha. Casi tres días sin beber colgado en una muralla interminable tiene que ser muy mala cosa, la boca se te inflama y la lengua se te pone como un estropajo. Bien se valió que Alberto Rabadá supo encontrar la salida de aquel diedro.
Jesús Mustienes ha resuelto con creces la escalada de la vida, la más importante de todas, y la más difícil sin duda.
Muchos pensamos que no hay ningún secreto ni poción mágica. Jesús Mustienes decidió quedarse en la adolescencia, ser un chaval para el resto de su vida. ¡Una muy buena elección!
La Gran Aguja de Ansabere con la variante "directa" de salida Rabadá-Mustienes 1958. La parte inferior del diedro nordeste está oculta por el gran contrafuerte de la base. Abierta en 1954 por Jean y Pierre Ravier y Guy Santamaría, con un vivac, constituyó un "antes y un despues" en la historia del pirineísmo. La variante de los dos aragoneses, en 1958, sigue siempre el fondo del diedro sin eludir las dificultades y les requirió dos vivacs con un estribo para cada uno como único reposo. Con cuerdas de cáñamo y sin provisión de agua, Rabadá y Mustienes intentaron hidratarse comiendose el musgo que iban encontrando por la pared. Un itinerario de extrema dificultad, ED superior/A3, del que medio siglo más tarde no se conocen apenas repeticiones ¡No está mal para un novato en su primera salida a los Pirineos!
En esta bella foto tomada desde el contrafuerte puede verse a los guías Jacques Lacaze, H. Flechere y Jean Pierre Barokas en el transcurso de la primera invernal del diedro nordeste (1973). Poco más arriba del techo, la via original abandona el fondo del diedro y busca la zona de menor resistencia por la pared de la derecha. Alberto Rabadá y Jesús Mustienes optaron por seguir recto hasta la cumbre abriendo una variante "directísima" de extrema dificultad.
Casualmente yo mismo coincidí con Jean Pierre Barokas unos meses antes en el espolón norte del Petit Pic del Ossau, una ruta de ambiente formidable en la que me acompañaba el veterano escalador Gregorio Villarig. Jean Pierre Barokas se consagró como alpinista al año siguiente consiguiendo la cara norte del Eiger con Raymond Despiau.
EIGER DESTINO FINAL.
Alberto Rabadá primero y Jean Pierre Barokas después, Ansabere en los inicios, Grindelwald al final. ¿Qué montañero no soñó alguna vez escalar la cara norte del Eiger? ¿Los que tuvieron ocasión, no lo han intentado?
LUCES
Y SOMBRAS SOBRE ANSABERE
Avanza ya el otoño apagando mil colores
detrás muy al fondo va quedando la tormenta,
la ventana deja que Ansabere se ilumine
para enseñarnos por un momento su belleza.
Dormirá el invierno su silencio con las nieves
y luego de nuevo explotará la primavera,
en el jardín salvaje brotarán nuevas flores
para alegrar la vida con savia verdadera.
Gregorio
Ariz.
Ascensión al Island Peak 6.189 m
Reportaje fotográfico de Fernando Sin Buil (Zaragoza)
Tomando sopa en el campamento base. Fernando es el 2º por la derecha.
Paso al glaciar.
Vertiente sur del Island Peak.
Muro de hielo.
Arista
LLegando a la cima
Últimos metros
Pedro saluda desde la cumbre.
El descenso no es fácil.
Gracias Fernando por compartir estas preciosas imagenes. El Himalaya ¡qué envidia!
Un "6.000" más para tu colección. Estupendo y gracias por tu apoyo al homenaje que estamos organizando en el 50 aniversario de nuestra cordada aragonesa.
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Recordando a Hölderlin, el poeta de la poesía
Dios está cercano y es difícil verlo…
Allí en dónde está el peligro crece también lo que salva.
Los fugitivos buscan refugio y los valientes sueños.
Resulta insensato el deseo ante el destino
Los Alpes sagrados, de arquitectura celeste, son
castillos de los dioses… y allí
sorprendí a mi alma conversando conmigo.
Hallar lo grande es mucho,
y aún queda bastante
Y quien así lo busque tendrá que andar las
sendas de los mismos dioses
Pues nunca la violencia pudo doblegar al cielo
Dios está cercano y es difícil verlo…
Allí en dónde está el peligro crece también lo que salva.
Los fugitivos buscan refugio y los valientes sueños.
Resulta insensato el deseo ante el destino
Los Alpes sagrados, de arquitectura celeste, son
castillos de los dioses… y allí
sorprendí a mi alma conversando conmigo.
Hallar lo grande es mucho,
y aún queda bastante
Y quien así lo busque tendrá que andar las
sendas de los mismos dioses
Pues nunca la violencia pudo doblegar al cielo
UN JOVEN COLABORADOR DEL CLUB PIRINEOS
NOS OFRECE UNA IMAGEN DEL NEVADO
ISHINCA 5.530 m (Cordillera Blanca-Perú),
acompañado del himalayista alicantino Luis María
Barberó, que fallecería dos años más tarde en el G-II.
Cota 5.200, tiempo variable.